El internet de las cosas está revolucionando la vida de las personas en todos sus ámbitos. Esta tecnología con la que interconectar objetos y servicios a través de internet, es ya muy conocida por sus ventajas en los en los hogares. Pero también puede ser de una gran utilidad en el sector de la hostelería, donde ya ha empezado a mostrar sus beneficios. Y cuya implementación está cada vez más extendida.

Mediante el internet de las cosas, se puede optimizar la actividad de nuestro bar o restaurante. Y también es una oportunidad, como veremos, de mejorar la experiencia de los clientes. La hostelería del futuro va a estar fuertemente condicionada por esta tecnología. De modo que en este artículo te explicamos cómo el internet de las cosas puede facilitar la labor de los hosteleros; y te enseñamos algunas de sus principales aplicaciones.

 ¿A qué llamamos “el internet de las cosas”?

El internet de las cosas, también conocido en inglés como Internet of Things (o por sus siglas, IoT), es la red de objetos de la vida cotidiana que se interconectan a través de tecnología informática. Se trata de un concepto que surgió en el año 1999, pero que se ha popularizado sobre todo en los últimos años, gracias a sus aplicaciones para domótica, sistemas de seguridad, etc . Y la hostelería digital, por supuesto, no se ha quedado atrás en la utilización de esta herramienta.

¿Cómo está cambiando el internet de las cosas al sector de la restauración?

En la actualidad, ya una gran parte de las tecnologías que utilizamos en nuestra vida diaria están interconectadas; y comparten sus datos para lograr mayor automatización, optimización y personalización.

El internet de las cosas ofrece en la actualidad múltiples posibilidades para un bar o restaurante.  Mediante aplicaciones móviles, el propietario o encargado de un establecimiento puede controlar desde su smartphone ciertos procesos en la cocina, factores ambientales de la sala… Veámoslo más claramente con algunos ejemplos.

●       Optimización de la actividad en la cocina

Una de las opciones que plantea el internet de las cosas es la de controlar y conectar los aparatos que se emplean en una cocina desde un dispositivo móvil.

Estas funciones se pueden activar, por ejemplo, a través de la aplicación Hotschedules IoT Platform. Esta innovadora herramienta ofrece información actualizada sobre los tiempos de cocción o la temperatura a la que se están cocinando los platos. Por si no fuera suficiente, también se puede controlar el funcionamiento de los aparatos electrodomésticos. Y se pueden apagar y encender cómodamente desde el dispositivo móvil.

Otro ejemplo interesante de IoT para cocina es el de Smart Diet Scale. Mediante unos sensores, permite calcular el peso de los alimentos y su contenido calórico y nutricional. De este modo, nos puede ayudar a preparar los menús de nuestra carta para que sean equilibrados.

●       Una experiencia personalizada para los clientes

Una de las funcionalidades más atractivas del internet de las cosas es la de personalizar la experiencia de los clientes. Así, con aplicaciones como Synkick, el cliente puede aportar su música a las listas de reproducción del local. Puede ser considerada una “evolución 2.0 de la gramola” con la que el hilo conductor del bar o restaurante se puede adaptar a los gustos de la clientela.

●       Adaptar las condiciones de la sala con un clic

El internet de las cosas también permite controlar la temperatura óptima del restaurante o la iluminación del local en cada momento. Es decir, podemos adecuar el ambiente de nuestro bar o restaurante fácilmente. Y no solo eso, con la aplicación Density, por ejemplo, también se puede medir el nivel de ocupación del restaurante mediante sensores. Como casi cualquier avance digital, esto supone un ahorro de tiempo y un control más exhaustivo de estos factores.

Sopesar beneficios y riesgos del internet de las cosas

El internet de las cosas ha llegado para quedarse. Pero en esta época de transición digital en la que todavía no estamos totalmente familiarizados con esta tecnología, es importante sopesar sus implicaciones. La conexión a internet mediante estos softwares, les da una información de los usuarios que la utilizan. Y, por lo tanto, supone una obtención y cesión de datos que tendremos que revisar para no contradecir la ética de nuestro negocio.

Por otra parte, aunque la seguridad de las tecnologías suele estar reforzada, estas son también hackeables; lo que significa que podrían vulnerar los procesos a los que se dedican.

En definitiva, el internet de las cosas puede traer grandes ventajas a la hostelería. Además de los ejemplos expuestos, hay también softwares especializados en la monitorización de equipos, control de stock… Estemos interesados o no, la proliferación de estas tecnologías y su implementación en los restaurantes son imparables.