El parón ocasionado por la pandemia del Covid-19 ha sido un fenómeno global y sin precedentes. Para conocer en profundidad las tendencias del mercado actual y las consecuencias de la crisis, contamos con el expertise de Vicente Montesinos, Experto en Investigación de Mercados de Restauración en NPD Group, empresa pionera en estudios de tendencias del mercado. Nos concede una entrevista en #JUNTOSCONLAHOSTELERIA en la que comparte con nosotros las claves para entender el impacto económico global y más concretamente para el sector hostelero en España.

Podemos empezar por una visión global de la situación. ¿Cuáles serán los efectos más destacables que esta crisis tendrá en la economía a niveles nacional y mundial?

La magnitud de esta crisis y su alcance global hacen que la situación a manejar no tenga precedentes. En el contexto de un mercado tan grande como el español, debemos considerar que su efecto no será uniforme, como tampoco lo es la estructura de consumo y productiva de los países afectados, por lo que es complejo generar patrones sobre los que guiarnos para definir perfiles o recetas de salida. Esa salida dependerá en gran parte de la situación de salida de cada segmento o de cada país.

Para plantear los posibles efectos debemos tener en cuenta dos variables independientes a la acción del sector, una relativa a la salud y al efecto sobre la actitud de prevención en los consumidores, y otra relativa a la economía, que tendrá un efecto negativo en la capacidad y propensión al gasto en el corto y medio plazo. Ambas circunstancias unidas generarán cambios de patrones de consumo y nuevas reglas de juego en el mercado, tanto en la oferta, como en la demanda.

¿Cómo afectará esa coyuntura a la restauración y a la hostelería en España en términos económicos? ¿Qué tipos de negocio dentro del sector de la hostelería crees que se verán más afectados tras esta crisis?

La afectación a la hostelería será muy relevante, y debemos prepararnos para enfrentarnos a un mercado diferente. Primero, porque van a desaparecer muchos puntos de venta, segundo porque otros no aguantarán las condiciones del nuevo mercado en el medio plazo y tercero porque todo el resto  del sector trabajará con unos niveles de estrés sobre sus operaciones muy elevados. Y todo ello, con un consumidor a la defensiva en muchos aspectos.

En este contexto, los operadores independientes de pequeño tamaño serán los eslabones más débiles de la cadena y los más expuestos a estar en el primer o segundo grupo, por lo que es clave apoyarlos y facilitarles su trabajo, tanto desde sus proveedores, como desde las administraciones. No obstante, el principal factor para su supervivencia en este entorno dependerá de ellos y de su capacidad para adaptarse y mejorar.

¿Qué oportunidades y qué amenazas destacarías de este nuevo entorno económico para la hostelería tras la crisis del Covid-19?

Se está hablando mucho de turismo nacional, ¿crees que esta tendencia podrá mitigar los efectos de la ausencia de turistas extranjeros?

Descontar el aporte que tradicionalmente han generado en torno a 85 millones de visitantes durante los últimos años es obligado, simplemente no estarán ahí este año.

Por otro lado, no podemos olvidar que nuestros nacionales se quedarán mayoritariamente en España este año. Desde NPD hemos hecho un ejercicio de previsión muy sencillo, trasladando el efecto del turismo a su equivalente en consumo nacional (cuantos nacionales necesitaríamos para compensar ese consumo), de ese estudio se deriva que el turismo equivale a más de un 10% del mercado total español en restauración. El resultado final es que podremos compensar una parte importante de ese efecto negativo si este verano nos quedamos en España. Aunque el nivel de compensación dependerá de varios factores que siguen siendo incógnitas: la duración del confinamiento y las limitaciones, el efecto de la aprensión de los consumidores y la relevancia del impacto económico en la disponibilidad de renta.

 ¿En qué mercado/s deberíamos poner nuestra mirada para afrontar este nuevo periodo dentro de la hostelería? ¿Podemos extraer conclusiones provechosas del mercado chino ahora que está en proceso de “vuelta a la normalidad”?

Sabemos que lo que define a esta época es la incertidumbre, sobre todo teniendo en cuenta que aún no sabemos cuándo se reabrirán los negocios, pero ¿se puede avistar un momento de recuperación? Se habla de una desescalada gradual, e incluso por comunidades...

El regreso a la nueva normalidad llevará un tiempo, en nuestra opinión al menos un año tras la reapertura de los mercados, pero esa nueva normalidad nos llevará a un mercado que, sin duda, será más pequeño incluso en el medio plazo.

No podemos olvidar que ese mercado será muy diferente y que muchos parámetros actuales dejarán de estar vigentes, desaparecerán modelos de negocio, otros cambiaran y surgirán otros nuevos.

En cuanto al escenario de una desescalada geográfica, es un tema complicado y dificil de manejar. Algo que hemos de tener presente es que las normas se han de aplicar con sentido común. Las decisiones en este sentido corresponden más al Ministerio de Sanidad que a las comunidades, aunque tras las ultimas noticias el Ministerio podría derivarlas a nivel autonómico en un momento dado. A priori es más probable una desescalada en fases, pero a nivel nacional.

Lo que si puede suceder es una desescalada gradual en función del modelo de negocio, siendo el delivery (como hemos visto desde el arranque de la crisis) el más favorecido. Posiblemente, le sigan el take away y las terrazas, siempre teniendo en cuenta las medidas que se anuncien para llevar a cabo estas reaperturas y las posible flexibilizaciones en cuanto a las terrazas que muchos organismos hosteleros están reclamando.

¿Cómo actuará el consumidor tras el fin del confinamiento? ¿La reapertura supondrá un “boom” para la hostelería o nos encontraremos ante un periodo de miedo por parte del usuario? ¿Podríamos hablar de un nuevo tipo de consumidor?

Para saber más sobre la perspectiva de futuro de la hostelería española post Covid-19 y el nuevo consumidor, no te pierdas nuestra segunda parte de la entrevista; en la que hablaremos de lo que se prevé para los próximos meses y años.