Las 7 pistas básicas para desmarcarte de otros candidatos que también estén buscando trabajo, y llegar a ser el/la elegido/a.

Para bien o para mal, la experiencia y los conocimientos que tengamos, son los que son. Y es muy duro eso de ser uno más de los cientos (o miles) de currículums que llegan a una oferta de trabajo, para que alguien se fije en ti, y pases las primeras cribas, y posteriores entrevistas para ser “el elegido”.

Pero para eso estamos aquí, para darte algunos trucos que te permitan llegar a serlo, o al menos, desmarcarte un poco de todos los demás llamando la atención.

Los currículums se leen como los periódicos. Leemos los titulares, y si algo llama la atención después se mira más en profundidad. Por eso, y aunque parezca algo obvio, no te cortes y resalta aquello que sea más importante, ponlo en primer lugar, usa mayúsculas, negritas, otra tipografía… lo que quieras, ¡pero hazlo notar!

Quieren verte la cara. El 80% de las personas recuerdan mejor las cosas si tienen imágenes, lo más seguro es que la persona que reciba tu CV pertenezca a ese 80%. Pónselo fácil y pon tu foto.

Recuerda, el tamaño importa. El currículum, mejor que sea corto. Invierte tiempo en resumir, en colocar y ordenar. Quien reciba ese currículum tiene que notar que está hecho con mimo. Un consejo, incluye un resumen de ti mismo en 4 líneas con tus cualidades, experiencia relacionada con el puesto y detallando qué quieres conseguir en el ámbito profesional.

No hay una forma “correcta”. No existen las normas de estructura para los currículums. No es que tengas que poner primero la formación, experiencia y después, hobbies o competencias. No hay reglas, así que usa la lógica según tus intereses y coloca la información como quieras.

Mejor no mientas. Si no tienes experiencia para un puesto, no te inventes cosas, resalta lo aprendido en otros puestos que te pueden servir para desempeñar bien esa posición. Por ejemplo, si trabajaste como administrativo, puedes resaltar que te ha aportado ser una persona metódica y ordenada (si es así, claro).

Que hablen bien de ti. Si puedes dar la opción de que soliciten referencias, hazlo, que si eres bueno, es casi mejor que lo digan otros a que lo hagas tú mismo.

Encontrar trabajo es un trabajo. Invierte un buen número de horas al día de manera sistemática, y no te quedes en aquello de “echar currículums a mansalva”. Tira de contactos, de redes sociales, dale caña a todos los portales de empleo. ¡Pon toda la carne en el asador!