Se va a cumplir un mes, desde que se eliminaron las restricciones para la hostelería. El pasado 15 de octubre los locales de restauración pudieron volver a abrir en sus horarios habituales, se permitió el 100% del aforo, y se eliminó la limitación y la distancia mínima entre mesas, tanto en espacios interiores como en terrazas, así como el número máximo de comensales por mesa. Por lo que es el momento ideal para replantearnos las prácticas de gestión de los locales de restauración y hostelería. Porque si lo hacemos bien, optimizar la administración de nuestro restaurante podría suponernos ahorrar mucho dinero, y aumentar considerablemente los beneficios en unos tiempos todavía difíciles.

A continuación te ofrecemos cinco consejos para mejorar la gestión de tu local y hacerlo más eficiente.

1. Escoge bien tus proveedores

No podemos elegir a nuestros clientes, pero sí que podemos escoger a nuestros proveedores. ¿Qué necesitamos para hacer funcionar nuestro negocio? ¿Y a quién se lo compramos? Para encontrar una respuesta tendremos que llevar a cabo un trabajo previo, definir los diferentes menús que vamos a ofrecer y tener en cuenta el tiempo de preparación de cada plato. El precio o la forma de pago serán factores a tener en cuenta a la hora de escoger proveedor, pero no pueden ser los únicos. Y tampoco tenemos por qué ceñirnos siempre a los mismos proveedores, sino que pueden ir variando en función de la temporada en la que nos encontremos. Lo importante es pensar de forma estratégica.

2. ¿Qué cantidades son las más adecuadas?

Hay que saber qué comprar, pero también cuánto comprar. Si nos pasamos en las cantidades, lo notaremos en la cuenta de resultados. Pero si no compramos lo suficiente, también tendremos un problema si, por el motivo que sea, el número de clientes aumenta de forma inesperada. No es fácil acertar siempre, pero cuánto más tiempo llevemos con nuestro negocio, más fácil será realizar un cálculo a medida. Y si a pesar de todo nos sobra producto, siempre podemos ser creativos y buscar la forma de aprovecharlo reinventando platos. Imaginación al poder.

3. Optimiza el stock

Un peligro de los locales de restauración es no saber lo que tenemos. Que muchos productos se queden en el almacén, acabemos por olvidarlos, y que se cumpla la fecha de caducidad sin haberlos podido utilizar. Para evitar que eso suceda, la solución es ser ordenado y llevar un inventario muy detallado de todo lo que tenemos, y de dónde lo tenemos. Existen programas informáticos de contabilidad que al principio nos exigirán un tiempo de adaptación, pero que si los utilizamos de forma sistemática, al final nos permitirán ahorrar no solo tiempo, sino también dinero.

4. Reduce gastos innecesarios

Seguro que hay mil pequeños consumos que podríamos evitar o, por lo menos reducir. Pero los más importantes probablemente sean el agua y, sobre todo en los últimos tiempos, la electricidad. En cuanto al primero, algunas acciones como contar con un sistema de grifos que reduzca los litros gastados o cambiar el lavavajillas por uno nuevo más eficiente pueden marcar una gran diferencia en el consumo de agua. Reducir la factura de la electricidad será algo más complicado dados los máximos históricos que estamos viviendo, pero siempre podemos intentarlo siguiendo unas pocas reglas: aprovechar al máximo la luz natural, utilizar bombillas de bajo consumo, limpiar a menudo los focos para que el polvo no disminuya su intensidad, reparar las fugas de calor de ventanas y puertas para evitar las corrientes de aire, etc.

5. ¡Involucra al personal, y mantenlo feliz!

Last but not least, un trabajador contento es más rentable que un trabajador insatisfecho. Si el personal va rotando con frecuencia eso suele implicar costes adicionales para la empresa, tiempo perdido, y en el peor de los casos, inestabilidad en los equipos de trabajo y, por extensión, en todo el local. En cambio, un trabajador feliz y motivado, que comparta los valores de la empresa, siempre remará en tu misma dirección. Programas de formación y de ahorro, premios al empleado del mes, recompensas... todo ello ayudará a mantener satisfechos a los trabajadores, y a que contribuyan a hacer posibles todos los puntos anteriores.

Si sigues todos estos consejos, estamos seguros de que tu negocio conseguirá ser más eficiente, y a la larga, tu cuenta de resultados lo notará bastante. Y más pronto que tarde, lograremos volver a una situación de normalidad, tanto de puertas afuera como de puertas adentro.